Mar del Plata reunión, un sábado por la mañana, a altos dirigentes de la Provincia de Buenos Aires. La unción cómo Obispo de Monseñor Giobando, colocó en la misma fila al gobernador bonaerense, Axel Kicillof, el intendente Guillermo Montenegro y el senador nacional del radicalismo, Maximiliano Abad.
Horas más tarde, Kicillof oficializó "Movimiento Derecho al Futuro", una nueva herramienta para disputar las próximas elecciones y enfrentar a la Libertad Avanza. El anuncio del gobernador, qué presumiblemente era el qué iba a realizar en el acto trunco del 8 de febrero, trajo todo tipo de repercusiones entre propios y ajenos.
"Kicillof se lanzó hace rato, esto no viene de ahora. El comunicado que publicó hoy solamente puede sorprender a los distraídos. Toda la gestión está supeditada a sus ambiciones electorales. Tiene la cabeza puesta en 2027", aseguró Abad en torno al anuncio.
"Ojalá el gobernador pusiera las mismas ganas para resolver los problemas de la Provincia. Por ejemplo la crisis del IOMA, que lleva mucho tiempo, y tiene a miles de afiliados en una situación de vulnerabilidad e incertidumbre", dijo en alusión a uno de los temas más críticos para la gestión.
"Ni hablar de la inseguridad, un tema en el que Kicillof se transformó en un gran evasor de responsabilidades. No hay planificación estratégica, se la pasa recitando excusas y deja solos a los intendentes. Mientras tanto, las familias viven con miedo ante el avance de la violencia", sentenció el senador nacional de la UCR.
"El nombre de la corriente interna, "Movimiento Derecho Al Futuro", parece una cargada a los bonaerenses, que viven una realidad marcada por el atraso y la falta de oportunidades. Si lo que buscan es un eslogan que refleje la gestión que lo cambien por "Estancados en el Pasado", concluyó entre la ironía y la crítica.