La guerra comercial tomó otra escala luego del zarpazo arencelario de Donald Trump. Este lunes, muchos mercados se desplomaron y varios países, entre ellos China, ya iniciaron la contraofensiva tarifaria.
Las medidas del magnate generan repercusiones en todas las economías y en todo tipo de industria, entre ellas, las más relevantes para Mar del Plata, como la pesca, la tecnología o la industria textil.
Pesca, de mal en peor
Para la pesca, en especial el sector fresquero, la política arancelaria de Trump cayó como un nuevo baldazo de agua helada que profundiza su crisis. Estados Unidos es uno de los principales destinos exportadores -oscila entre el tercer y cuarto lugar de destino de las ventas argentinas- y el arancel podría devenir en una baja del consumo.
En los muelles temen un parate progresivo y cada vez más grande de la flota que deviene, a su vez, en despidos en tierra y cierres de empresas. “Podría ser el golpe final para un rubro que ya está al borde del colapso”, advirtieron desde la Fundación Latinoamericana de Sostenibilidad Pesquera
Textiles, "un argumento de Del Caño en boca de Caputo"
Las medidas de Trump generan incertidumbre pero también lo hicieron los movimientos arancelarios de Luis "Toto" Caputo. Hace dos semanas, el ministro bajó los impuestos para proveedores del exterior, entre ellos China, lo que generó un fuerte repudio del sector textil que cree que se generará una situación de "competencia desleal".
"Hace dos años que venimos haciendo un esfuerzo enorme con una zanahoria delante: la promesa de baja de impuestos. Lo que no esperabamos era que se lo bajen a los chinos", reportó uno de los popes de la industria textil marplatense. "No se trata de limitar, sino de poner en situación de igualdad, de compensar", agregó.
"Que la ropa es cara porque los empresarios ganan mucha plata" es "un argumento de Del Caño en boca de Caputo", sentenció con bronca otra voz del sector.
¿Es un tema sectorial? Los manufactureros de ropa creen que hay un problema general y común a todas las PyMES vinculadas a la presión impositiva, la industria del juicio laboral y la burocratización.
Tecnológicas, a la espera
"Hay que ver como termina", explican a La Tecla desde un importante centro proveedor de servicios tecnológicos. Mucha de la mercadería proveniente de EEUU se encuentra parada por falta de venta debido a la incertidumbre. De momento, los aranceles solo alcanzan al hardware.