La Tecla Mar del Plata
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El secretario de Seguridad, Darío Oroquieta, acumula contratiempos desde que cumple funciones en el gabinete municipal.
En este caso, en lo referido a la Patrulla Municipal, uno de los ejes principales del gobierno para este año. Según supo este medio de fuentes calificadas, el agente Carlos Sale, designado por Oroquieta para coordinar las tareas de este cuerpo, pidió la jubilación en forma anticipada por diferencias con la metodología de trabajo del secretario.
Si bien actualmente se encuentra de vacaciones, el empleado municipal se habría “hartado” del trato diario del funcionario. La diferencia principal giraría en torno a la organización de los operativos y el patrullaje en la ciudad. Pedidos “irracionales” y llamados recurrentes por fuera del horario laboral también habrían inclinado la balanza para que finalmente se precipitara el alejamiento.
Vale recordar que Sale, a mediados de junio, había sido oficializado como Jefe de Departamento para “coordinar todas las tareas que realiza el Cuerpo Patrulla Municipal de Seguridad, como así también otorgarle el poder de fiscalizar los distintos operativos dispuestos desde la Secretaría y sus áreas dependientes”, según la resolución del Boletín Oficial a la que tuvo acceso este medio.
Además, los deberes encomendados estaban ligados a los retenes de acceso a la ciudad para monitorear el cumplimiento del DNU 297/2020 que dispuso el aislamiento social, preventivo y obligatorio “en rutas, vías y espacios públicos, accesos y demás lugares estratégicos" junto con fuerzas federales y provinciales.
No obstante, ya desde el verano, Sale cumplía tareas bajo las órdenes de Oroquieta. Y, desde los primeros meses, allá por la temporada de verano, había puntos de vista diferentes en torno a los lineamientos propuestos por el funcionario. Si bien no está confirmado cuándo se alejaría del puesto, sería a mediados de septiembre.
Irregularidades
Otra cuestión que pone en la mira al titular de Seguridad es que le habría solicitado a un empleado de mantenimiento de la comuna que haga refacciones en su vivienda. Según plantearon fuentes gubernamentales, la gravedad del hecho consiste en que Oroquieta le habría encargado los trabajos de refacción durante su jornada laboral y, ni más ni menos, utilizando materiales pertenecientes al Municipio.