Uno de los proyectos aprobados en la 2da Sesión Pública Ordinaria fue el pliego de bases y condiciones para licitar la playa "Santa Isabel", una Unidad Turísticas Fiscal ubicada en la zona de Chapadmalal y qué realza el creciente desarrollo del sur comunal.
No obstante, y al igual que ha ocurrido con otras licitaciones ubicadas en la costa, la Secretaría de Obras habría incurrido en algunos vicios y omisiones.
Según pudo recabar este medio, un privado se contacto con el Municipio en 2020 para conocer la disponibilidad del lugar para avanzar con un desarrollo. El proyecto de dictamen de la Comisión de Recepción y análisis de Iniciativas Privadas, previsto por el art. 6º del Anexo I de la Ordenanza 19.203, encargada de asesorar y verificar los requisitos de admisibilidad de la iniciativa presentada concluyó qué la firma cumplía "con todos los recaudos exigibles en la normativa de aplicación y aporta un valor distintivo para jerarquizar el sector, por lo que se aconseja declararlo de interés público mediante el dictado del acto administrativo pertinente".
No obstante, tras años de trámites e idas y vueltas, la Dirección de Control de Obras de UTF dictaminó qué "de acuerdo a la magnitud de la propuesta analizada la misma por su tamaño y cantidad de unidades habitacionales se asimila a un barrio de densidad media por lo que debería contar con la provisión de servicios de OSSE". Pero en el informe no se indican los parámetros urbanísticos que utilizan para llegar a esa conclusión ni dónde se encuentra prescripto tal postulado.
A su vez, dicho informe indica qué "conforme a la normativa vigente el proyecto no contempla el cumplimiento del Art. 42 de la Ley Nº12257, no cuenta con factibilidad hídrica otorgada por la ADA y no presenta Estudio de Suelo e Informe Paleontológico requerido por las Ordenanzas Municipales Nº 9417/94 y 22325/15."
A partir de lo reconstruido por este medio, quedó en evidencia que la parte interesada nunca pudo ingresar al terreno, teniendo en cuenta que no era propietario del mismo y sólo estaba presentando una propuesta general. Por otra parte, varias porciones del informe solicitan tareas qué están a cargo de la propia municipalidad.
Otro de los reclamos del privado es qué se avanzó con una licitación sobre un objeto con un proyecto en tratamiento.