18 de junio de 2025
PANORAMA
La calle, Cristina y las urnas: ¿qué dejó la jornada peronista en Mar del Plata?
La movilización masiva en respaldo a la expresidenta mostró músculo político en las calles marplatenses y en Plaza de Mayo. Sin embargo, a 21 días del cierre de alianzas, la interna no se resolvió, las listas están en suspenso y la pregunta sigue abierta: ¿la calle podrá ordenar al peronismo de cara a las elecciones?
El peronismo marplatense tuvo este miércoles una de sus jornadas más activas de los últimos años. Desde temprano, gremios, organizaciones sociales, partidos políticos y referentes locales se sumaron a la convocatoria en defensa de Cristina Fernández de Kirchner, condenada por la Corte Suprema a prisión domiciliaria e inhabilitación perpetua. La agenda estuvo repartida entre las movilizaciones locales, como la protesta matutina en Tribunales y la marcha de jubilados por la tarde, y una caravana de más de mil personas que viajó a Plaza de Mayo para reforzar el acto central.
En la ciudad, la escena se replicó con menor masividad pero fuerte carga simbólica: cortes de calle, pancartas, cánticos y referencias explícitas a la “persecución judicial” como bandera. Fue una postal clásica del peronismo militante, que recuperó centralidad discursiva y volvió a la calle con una consigna clara. A nivel simbólico, la jornada fue un éxito. A nivel político, en cambio, dejó más interrogantes que certezas.
A 21 días del cierre de alianzas y con la fecha del 7 de septiembre como objetivo inmediato, la marcha mostró los límites de la unidad: hubo múltiples columnas, escasa coordinación entre espacios y una CGT ausente del acto central. En ese marco, queda la gran incógnita: ¿qué rol podrá jugar Cristina Fernández de Kirchner de cara a la campaña? Condenada a prisión domiciliaria e inhabilitada para ejercer cargos públicos, su capital político sigue siendo gravitante, pero su margen de maniobra es cada vez más acotado. ¿Será figura de unidad o de resistencia simbólica? ¿Podrá ordenar un peronismo fracturado desde una posición institucional debilitada? La respuesta dependerá no sólo de su voluntad, sino también de la respuesta de una dirigencia que, hasta ahora, parece más cómoda en la consigna que en el armado.
En Mar del Plata, los sectores alineados a Axel Kicillof y los más cercanos a Fernanda Raverta participaron por separado. El Movimiento Evita, La Cámpora, el Frente Renovador (FR), y Acción Marplatense (AM) compartieron escenario en Plaza de Mayo, pero aún no comparten estrategia electoral.
Mientras tanto, el resto de las fuerzas observa. La Unión Cívica Radical (UCR) refuerza sus campañas territoriales, el PRO continúa su alineamiento discursivo con el oficialismo nacional y La Libertad Avanza (LLA) aprovecha la escena polarizada para instalar su narrativa de orden. En ese marco, el peronismo, pese a la potencia de su mística, sigue sin resolver su mayor dilema: cómo transformar la energía callejera en una estrategia electoral coherente que le permita competir, y no solo resistir, en las urnas.
La calle habló. El problema es que no está claro quién escuchó.