La Tecla Mar del Plata
Todos los derechos reservados
El natatorio del Centro de Educación Física N°1 de Mar del Plata permanece inactivo desde abril de 2018. La estructura que albergaba a más de 1.500 personas por día sigue inutilizable, sin que se vislumbre una solución concreta por parte del Gobierno de la provincia de Buenos Aires, responsable del establecimiento. A lo largo de estos años, fracasaron los intentos de reactivación y la comunidad educativa insiste en su reclamo. El natatorio cerrado atravesó un año de la gobernadora María Eugenia Vidal y casi cinco de Axel Kicillof sentado en el sillón de Dardo Rocha.
El problema comenzó hace casi siete años, cuando una fuga de gas obligó a la empresa Camuzzi a retirar el medidor, dejando inoperativa la pileta y los vestuarios. Desde entonces, se ejecutó una primera fase de trabajos, financiados por el Municipio a través del Fondo de Financiamiento Educativo, que incluyó reparaciones en techos, desagües y pluviales. Sin embargo, la etapa crucial de la obra, que contempla la renovación de las calderas y termotanques, sigue pendiente.
El Gobierno municipal intentó dos veces avanzar con la licitación para completar la obra, pero ambas fracasaron. En la primera convocatoria, no hubo oferentes; en la segunda, en la única oferta presentada superaba ampliamente el presupuesto oficial y fue descartada. Mientras tanto, el deterioro avanza y las instalaciones sufrieron hechos de vandalismo que agravan la situación.
A medida que avanza el año electoral, la reapertura del natatorio podría convertirse en un tema de debate entre el Municipio y la Provincia. La comunidad educativa sigue exigiendo respuestas concretas, mientras que el futuro del CEF N°1 se mantiene en la incertidumbre.