El gobierno dio una nueva puntada en su plan para "combatir a los violentos" y reforzar la gestión en materia de seguridad. Este martes, adjudicó 40 armas no letales por más de 58 millones de pesos. Se trata de 30 pistolas cortas, 10 rifles de asalto y 1.000 municiones de la firma Bersa.
Las mismas comenzarían a utilizarse a partir de enero, más probablemente alrededor de la segunda quincena y podrán ser equipadas por el personal municipal.
Este tipo de dispositivos son de venta libre, motivo por el cual su incorporación no requirió un debate en el Legislativo.