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Contraste laboral en “La Feliz”: la baja en la desocupación podría estar impulsada por la suba del empleo informal
El informe sociolaboral de la UNMdP destaca las diferencias entre los datos del “Mercado de Trabajo” difundido por el Indec a nivel nacional y el local. Además, sugiere que la reducción del desempleo en Mar del Plata podría darse “si hubiera aumentado el cuentapropismo informal y el empleo no registrado”.
El último informe sociolaboral de la Facultad de Ciencias Económicas de la Universidad Nacional de Mar del Plata, correspondiente al segundo trimestre de 2024, destaca las diferencias en el mercado laboral entre los datos proporcionados por el INDEC a nivel nacional y los relevados en el partido de General Pueyrredon. Además, señala que la baja de la desocupación en el ámbito local podría deberse al aumento del trabajo informal.
“En el plano macroeconómico, durante el segundo trimestre se profundizaron las tendencias recesivas observadas desde fines del año pasado, con fuertes caídas en el nivel de actividad de sectores productivos importantes como la industria manufacturera, la construcción y el comercio, entre otros. Asimismo, tanto el consumo como la inversión exhiben fuertes retrocesos que evidencian una contracción significativa de la demanda agregada”, destacan en el informe.
Luego, señalan que “en el escenario laboral se presentan resultados opuestos a nivel nacional y local”. Según los datos del INDEC a nivel nacional, “en términos interanuales aumentan las tasas de actividad (llega al 48,5%), la de desocupación (7,6%) y la de subocupación (11,8%), mientras que la tasa de empleo se mantuvo casi constante (44,8%). Asimismo, se produjo un leve aumento de la cantidad de trabajo registrado (+78.056 trabajadores/as), que es el resultado de una fuerte caída del empleo en el sector privado (-122.457) y el aumento de monotributistas (+208.281)”.
En Mar del Plata, en cambio, “se presentó un aumento del número de ocupados (+14.000) y una disminución de la cantidad de desocupados (-5.000), lo que generó un incremento en la Población Económicamente Activa (+9.000). Esto impacta en un aumento de la tasa de actividad (que se ubicó en 49,2%), la tasa de empleo (46,0%) y la tasa de subocupación (12,2%). Por su parte, disminuyeron la tasa de desocupación (6,4%) y la presión general en el mercado de trabajo (18,8%)”.
“La única situación en la que el aumento del empleo y la disminución de la desocupación local tendrían sentido sería si hubiera aumentado el cuentapropismo informal y el empleo no registrado frente a una caída en la cantidad de población asalariada registrada”, apuntaron en el informe.