El caso del buque pesquero "Repunte" se había vuelto paradigmático en las causas por naufragios en el Mar Argentino. Gracias a la movilización constante de las familias en la búsqueda de Justicia se había logrado conectar el naufragio -en el que murieron diez tripulantes- con una serie de negligencias que iban desde la modificación irregular del buque hasta la falta de controles pasando por el empresario dueño de la nave. 
 

En ese sentido, significó un cambio de la visión histórica dónde la responsabilidad se colocaba en la tripulación o la meteorología y no en las instituciones del Estado o los privados. Entre otros hechos relevantes, en el 2022 la Junta de Seguridad en el Transporte, encargada de generar protocolos a partir de este y otro tipo de siniestros, presentó un informe dónde la causa del hundimiento eran todas las modificaciones que se le hicieron al Repunte y por las que habría perdido estabilidad. 

No obstante, dicho periplo, de más de 7 años, tuvo un corte abrupto en las últimas horas al conocerse el fallo del juez Lleral que sobreseyó a todos los imputados y cerró el expediente.