17 de diciembre de 2025
UNIDAD TURÍSTICA FISCAL
Luna Roja: autorizan demoliciones en medio de la tormenta ambiental
A pocos días del inicio de la temporada estival y tras la revocación de permisos provinciales por contaminación, el gobierno municipal avaló un plan de obras para la UTF Playa Bonita que incluye el desmantelamiento de estructuras, reabriendo la polémica sobre el control estatal en la zona sur.

En un escenario de máxima tensión política y ambiental en las costas de Chapadmalal, la Municipalidad de General Pueyrredon ha dado un paso que promete agitar aún más las aguas en la Unidad Turística Fiscal (UTF) Playa Bonita. A través de una resolución conjunta, el Ente Municipal de Turismo y Cultura (EMTURyC) y la Secretaría de Obras y Planeamiento Urbano autorizaron a la firma concesionaria EJC S.A. a proceder con la demolición total de la edificación conocida como "casa del sereno". La medida se produce apenas semanas después de que la Autoridad del Agua (ADA) de la provincia de Buenos Aires detectara niveles críticos de contaminación en el acuífero local y revocara los permisos de extracción y volcado de efluentes al balneario Luna Roja.
La resolución municipal responde a un pedido directo de la firma, que solicitó el retiro de la construcción ubicada contigua a la bajada pública. El plan de trabajos aprobado contempla un cronograma de tres semanas que incluye la desconexión de servicios de luz y agua, el retiro de mobiliario, aberturas y cubiertas de chapa, culminando con la demolición de muros y cimientos. El documento oficial subraya que, una vez finalizadas las tareas, el terreno deberá ser nivelado manualmente y cercado con un alambrado romboidal de 1,80 metros de altura. Si bien el texto legal enfatiza que el concesionario asume la responsabilidad civil exclusiva por los daños que pudieran ocasionarse y debe cumplimentar las normas de seguridad e higiene vigentes, la decisión administrativa no menciona el delicado trasfondo judicial y ambiental que rodea a la unidad.
Para las organizaciones vecinales y el Observatorio Costanero Sur, este movimiento de piezas sobre el territorio no es una simple mejora de infraestructura, sino una acción que se solapa con las denuncias de "limpieza de pruebas". Cabe recordar que durante el mes de octubre, tras la confirmación de la presencia de coliformes fecales y altos niveles de nitratos en los pozos que abastecen al barrio, las asambleas denunciaron que EJC S.A. intentaba "borrar rastros" de irregularidades antes de las inspecciones. En este contexto, la autorización para demoler una estructura justo antes del pico de la temporada genera suspicacias entre quienes exigen la caducidad de la concesión, la cual tiene vigencia hasta el 25 de enero de 2030.
Desde la esfera política, la resolución conjunta intenta normalizar la situación operativa de la UTF apelando al cumplimiento técnico de la normativa municipal, delegando la supervisión en la Dirección de Control de Obras. Sin embargo, la falta de permisos provinciales para el manejo de aguas sitúa a la administración de Luna Roja en un limbo legal que el Ejecutivo local parece eludir con esta nueva disposición. Mientras las máquinas se preparan para ingresar a la playa, el conflicto en el sur marplatense se consolida como un caso testigo de la puja entre la explotación privada de los recursos públicos y la protección de un ecosistema que, según los informes técnicos, ya muestra signos de agotamiento y riesgo sanitario.